- ¿Tú preguntas y yo sacudo? - dijo Asa [...]
- Como siempre, Darling,"
Ficha técnica
- Autor: Raúl Montesdeoca
-Editorial: Dlorean Ediciones
- Colección Tesla
- Steampunk, acción, aventura
- Páginas: 269
- Contiene ilustraciones y el relato en el que se basa la novela
-Precio:15'95€
Gracias a la editorial por el ejemplar electrónico
Sinopsis:
Raúl Montesdeoca presenta las aventuras de dos agentes secretos de Su Majestad la Reina Victoria. Patrick Steed y Asa Ishikawa. Él es un perfecto gentleman británico y ella la más letal espada del temido clan ninja Ishikawa. Enviados por el Buró del Servicio Secreto Británico a investigar la cada vez más creciente amenaza de la Yihad Mahdista, los dos agentes recorrerán Egipto, Zanzíbar y Sudán enfrentándose al sinfín de enemigos que tiene el Imperio Británico. La aparición de un artefacto llamado “La Máquina del Juicio Final” podría ser la pieza definitiva para que la victoria en la inminente guerra caiga del lado otomano.
Por si fuera poco, la misteriosa figura que controla el crimen en Limehouse, conocida como “El Escorpión”, tiene sus propios planes para Asa… y no son buenos.
Opinión:
Que una editorial sea pequeña y no demasiado conocida no es sinónimo de peor calidad que las que están en la cumbre y que edita una veintena de libros casi cada mes de autores más consagrados que otros tanto nacionales como internacionales. Eso es algo que cada día voy aprendiendo después de leer mi segunda novela de la editorial Dlorean (y el de otras editoriales parecidas) de la que he disfrutado como una enana y que he alargado su lectura para poder saborearla como se merecía.
La máquina del Juicio Final es una historia de aventuras, acción, Servicios Secretos, espías y staempunk ambientada al finales del siglo XIX, una época históricamente algo convulsa con episodios conflictivos en los pequeños estados europeos, pero en los que intervienen las grandes potencias del continente. Y una de estas potencias, la que tenía el poder hegemónico del antiguo continente era le Imperio Británico.
Una día normal dentro del matrimonio Steed- Ishikawa, Patrick y Asa, deciden ir hasta Limehouse para dar un paseo y comprar té. Lo que parecía una simple salida cotidiana en un matrimonio se transforma en una persecución por el barrio Chino a causa de un ataque contra Asa, ninja kunoichi del clan Ishikawa. Por si ese suceso fuera poco, el matrimonio es llamado por el mandamás del Servicio Secreto Británico para encargarles a los dos espías una importante misión: ir al El Cairo y unirse a la expedición de sir Henry Stanley para conseguir detener a la Yihad Mahdista y salvar a Emin Pasha. Lo que al principio parece una misión "sencilla" desencadena en algo mucho peor y más peligroso en el que la vida de muchísimas personas y el devenir de la guerra están en juego.
Esta novela ha sido un cúmulo de sorpresas del principio hasta el final. Primeramente, Raúl comienza esta trepidante aventura de la mejor forma posible: con una persecución desenfrenada. Y a raíz de ésta, se empieza a articular la trama y las subtramas que conforman toda la novela; una con una ambientación espectacular. Además de la buenísima prosa del autor y de sus grandes diálogos repartidos a lo largo de todos los capítulos, lo mejor de esta novela es la gran capacidad de Raúl para mezclar la realidad histórica de la época - y otras que no- con el steampunk más cañero. Tal es su cohesión, su simbiosis, que todos los acontecimientos que se suceden poseen una gran verosimilitud, y en ningún momento al lector le chirria nada de lo que sucede ni cómo sucede.
Y suceden muchas cosas. Que digo muchas, muchísimas. El ritmo de la novela esta exquisitamente equilibrado, tendiendo siempre más a la acción, pero con muchas otras partes con información histórica verídica conjuntamente con otra completamente original del autor que aligera la tensión a la vez que nos amplía tanto los acontecimientos que están pasando como ese mundo creado por Raúl. Todo esto sin olvidarnos que estamos ante una novela de espionaje en la que nuestro matrimonio protagonista pasará las de Caín para conseguir averiguar lo que verdaderamente está sucediendo, mezclado con traiciones y secretos que dejan con la boca abierta.
Sobre los personajes, el elenco es grande y variopinto, con algunos de ellos verídicos como el Primer Ministro Gladstone, entre otros, combinados con los originales. Cada uno de ellos está grandemente caracterizado y es imposible no cogerles cariño al dúo protagonista juntamente con aquellos que están de su lado. Patrick Steed es todo un gentelman británico de época victoriana, así como un gran agente del Servicio Secreto con una gran inteligencia que le permite salir de los embrollos donde se mete con el uso de su ingenio, su maravillosa esposa Asa y los inventos del profesor Barnaby. Por el contrario, Asa es una kunoichi perteneciente al Clan Ishikawa y es una letal asesina y una maestra del sigilo. A diferencia de su esposo, ella y las máquinas no se llevan bien, pero los dos se complementan
perfectamente. Además, cabe destacar el importante papel que tiene Asa en toda la trama y el hecho de que, en ningún momento, se nos presenta a una mujer dependiente o débil con los hombres. Todo lo contrario, la mayoría de las veces ella es la que le saca las castañas del fuego a Steed y no se deja infravalorar por nadie. Por algo la joven mantiene su apellido familiar y no se lo cambia por el de su marido.
La Máquina del Juicio Final se sucede en distintos espacios y en un corto espacio de tiempo pasando por Londres, El Cairo, Zazímbar y el Sudán. Esto le otorga todavía más dinamismo y le da al autor una gran manga ancha para todo el repertorio y despliegue que nos hace con distinto tipo de armamento y de vehículos, introduciendo todos esos elementos que hacen tan maravilloso el steampunk. Eso sí, aunque la trama principal de la novela se resuelve, queda un final abierto para dejar la puerta abierta a futuras aventuras protagonizadas por Steed y Asa.
Por último, al final de la novela, tenemos el relato "Al servicio de su majestad la reina Victoria". Éste es la primera vez que se publica y fue a raíz de dicho relato que nacieron Patrick Steed y Asa Ishikawa; el broche de oro perfecto para una novela que lo tiene todo y que cumple de sobras con cualquier expectativa que un lector pueda hacerse. Y en el caso que no se las hiciera, la disfrutaría y la devoraría de igual forma.
Para concluir, quiero decir que no suele pasarme con muchas novelas eso de no querer terminarlas. Sólo con las que más me gustan voy espaciando mis horas de lectura para intentar alargar el final de lo mucho que las estoy disfrutando. Pues eso mismo me sucedió con La Máquina del Juicio Final. Si te gustan las aventuras, el mundo de los espías, la época victoriana y el más maravilloso y bien creado steampunk, no puedes perderte esta novela.
Afila tus katanas, coge tu sombrero de copa y no te olvides la pistola de repetición con silenciador. Los buenos espías van con sigilo y nunca son descubiertos. Bienvenidos a la Universal Import & Export.
Nota: 5/5
Esta novela ha sido un cúmulo de sorpresas del principio hasta el final. Primeramente, Raúl comienza esta trepidante aventura de la mejor forma posible: con una persecución desenfrenada. Y a raíz de ésta, se empieza a articular la trama y las subtramas que conforman toda la novela; una con una ambientación espectacular. Además de la buenísima prosa del autor y de sus grandes diálogos repartidos a lo largo de todos los capítulos, lo mejor de esta novela es la gran capacidad de Raúl para mezclar la realidad histórica de la época - y otras que no- con el steampunk más cañero. Tal es su cohesión, su simbiosis, que todos los acontecimientos que se suceden poseen una gran verosimilitud, y en ningún momento al lector le chirria nada de lo que sucede ni cómo sucede.
Y suceden muchas cosas. Que digo muchas, muchísimas. El ritmo de la novela esta exquisitamente equilibrado, tendiendo siempre más a la acción, pero con muchas otras partes con información histórica verídica conjuntamente con otra completamente original del autor que aligera la tensión a la vez que nos amplía tanto los acontecimientos que están pasando como ese mundo creado por Raúl. Todo esto sin olvidarnos que estamos ante una novela de espionaje en la que nuestro matrimonio protagonista pasará las de Caín para conseguir averiguar lo que verdaderamente está sucediendo, mezclado con traiciones y secretos que dejan con la boca abierta.
Sobre los personajes, el elenco es grande y variopinto, con algunos de ellos verídicos como el Primer Ministro Gladstone, entre otros, combinados con los originales. Cada uno de ellos está grandemente caracterizado y es imposible no cogerles cariño al dúo protagonista juntamente con aquellos que están de su lado. Patrick Steed es todo un gentelman británico de época victoriana, así como un gran agente del Servicio Secreto con una gran inteligencia que le permite salir de los embrollos donde se mete con el uso de su ingenio, su maravillosa esposa Asa y los inventos del profesor Barnaby. Por el contrario, Asa es una kunoichi perteneciente al Clan Ishikawa y es una letal asesina y una maestra del sigilo. A diferencia de su esposo, ella y las máquinas no se llevan bien, pero los dos se complementan
perfectamente. Además, cabe destacar el importante papel que tiene Asa en toda la trama y el hecho de que, en ningún momento, se nos presenta a una mujer dependiente o débil con los hombres. Todo lo contrario, la mayoría de las veces ella es la que le saca las castañas del fuego a Steed y no se deja infravalorar por nadie. Por algo la joven mantiene su apellido familiar y no se lo cambia por el de su marido.
Asa y Steed luchando por su vida en El Cairo |
Por último, al final de la novela, tenemos el relato "Al servicio de su majestad la reina Victoria". Éste es la primera vez que se publica y fue a raíz de dicho relato que nacieron Patrick Steed y Asa Ishikawa; el broche de oro perfecto para una novela que lo tiene todo y que cumple de sobras con cualquier expectativa que un lector pueda hacerse. Y en el caso que no se las hiciera, la disfrutaría y la devoraría de igual forma.
Para concluir, quiero decir que no suele pasarme con muchas novelas eso de no querer terminarlas. Sólo con las que más me gustan voy espaciando mis horas de lectura para intentar alargar el final de lo mucho que las estoy disfrutando. Pues eso mismo me sucedió con La Máquina del Juicio Final. Si te gustan las aventuras, el mundo de los espías, la época victoriana y el más maravilloso y bien creado steampunk, no puedes perderte esta novela.
Afila tus katanas, coge tu sombrero de copa y no te olvides la pistola de repetición con silenciador. Los buenos espías van con sigilo y nunca son descubiertos. Bienvenidos a la Universal Import & Export.
Nota: 5/5
¡Hola!
ResponderEliminarQue chulo, tiene muy buena pinta y es un estilo de lectura que me gusta mucho así que me lo apunto para un futuro
¡Besos!
Hola
EliminarEstoy segura de que lo vas a disfrutar cuando te hagas con él.
Un beso.