"La primera vez empezó él. La segunda yo. Desde entonces lo hemos hecho muchas veces. Nos tocamos en uno al otro como una diversión más."
FICHA TÉCNICA- Título original: Itsukai koi no naru made (en japonés いつか恋になるまで)
- Autora: Tomo Kurahashi (en japonés 倉橋トモ)
- Editorial Española: Arechi Manga
- Editorial Japonesa: Takeshobo
- Serie de dos tomos serializado en la revista Moment. Publicado en 2019
- Precuela de ¡Formemos una familia! y su secuela Akete mo Kurete mo: Zoku: Itsuka Koi ni naru made. Ambas series también publicadas en la revista Moment.
- Puesto número 6 en la categoría BEST comic en los BL Awards 2020.
- BL, comedia, romance, slice of life
- Traducción: Natalia Mintegi Arrieta (Daruma Serveis Lingüístics, S.L)
- Páginas: 204
- Precio: 9€
- Reseña de ¡Formemos una familia!
SINOPSIS
Chiaki y Kazuma han crecido como si fueran hermanos, pero en su tercer año de secundaria se dan cuenta de lo que sienten el uno por el otro. Todo comienza cuando Kazuma sorprende a Chiaki mesturándose y le hace una propuesta que ambos aceptan como un juego más... o así lo interpreta Kazuma. Por eso, cuando este comienza a salir con una chica, no le da demasiada importancia. Sin embargo, a Chiaki cada vez le resulta más complicado reprimir sus sentimientos y sufre al ver la expresión triste de Kazuma. Entonces decide dar el siguiente paso.
OPINIÓN PERSONAL
Con ¡Formemos una familia!, Tomo Kurahashi nos había presentado a Chiaki y Kazuma, dos amigos de la infancia que se habían criado como hermanos y que en su adolescencia habían empezado a salir juntos una vez se percataron de que estaban enamorados. Dos años después de su publicación en Japón, sensei decidió hacer ¡Enamorémonos! manga precuela en dos tomos en donde explicaría en su totalidad, y como los fans de la pareja merecíamos, su enamoramiento y el inicio de una de las más bonitas parejas dentro del boys love.
Kazuma y Chiaki, junto con Tomoe, se han criado juntos como si fueran hermanos y, desde temprana edad, Kazuma siempre ha tenido un instinto sobreprotector porChiaki, el cual siempre ha sido muy inseguro a la vez que muy cuqui. Una noche en la que Chiaki se queda a dormir en su casa, Kazuma lo pilla haciéndose una paja y, al verlo, el chico no puede evitar excitarse. Eso hace que Kazuma le proponga a Chiaki el aliviarse juntos. Chiaki no se niega, es más, se deja llevar por Kazuma del cual lleva enamorado toda la vida medio en secreto medio sin serlo. A pesar de que tiene novia, Kazuma continua el juego con Chiaki y cada vez que estan solos en su casa, ambos se tocan y juegan a tener sexo sin pasar de las caricias. Pero lo que para Kazuma es algo temporal a lo que no le da mucha importancia, para Chiaki es mucho más. Pero, ¿qué pasará cuando Kazuma sepa lo que siente realmente Chiaki y que sus juegos nunca lo fueron tanto?
Sin cortarse un pelo a la hora de representar la ardiente adolescencia, Tomo Kurahashi se centra totalmente en el romance de Kazuma y Chiaki y en cómo pasan de ser simples amigos a algo más. La acción comienza cuando ellos van al instituto, en sus últimos años para ser más exactos, y una noche ambos traspasan una línea que hará que todo cambie. Si bien Kazuma no le da más importancia que la de divertirse con su amigo y gozar del placer sexual en una edad en la que se tienen las hormonas revolucionadas, para Chiaki es una forma de poder estar al lado de Kazuma y de poder sacar medianamente lo que siente por él y su deseo.
Kazuma nunca ha sido consciente de lo que siente Chiaki por él, a diferencia de Tomoe quien sabe perfectamente qué siente su mejor amigo por su otro mejor amigo pero se mantiene al margen, estando ahí para darles consejos cuando ellos más lo necesitan.
Dividido en dos tomos, ¡Enamorémonos! sigue la línea ya trazada en ¡Formemos una familia! y también se trata el significado de lo que es ser una familiay cómo los tres chicos en general, y ellos dos en particular, sienten o ven que es una familia. ¡Enamorémonos! es el inicio para Chiaki y Kazuma en el que, una vez acepten sus mutuos sentimientos, y den el paso para ser una pareja, deberán dar más pasos. Estos pasos son llegar hasta el final en lo que se refiere dentro del terreno sexual y luego enfrentarse a su familia y confesarles, llegado el momento, que estan juntos y que quieren estar juntos con todo lo que eso conlleva: no formar una familia tradicional heteronormativa.
Con su hermoso dibujo lleno de detalles y la buenísima elección de planos y de tempos, Kurahasi es capaz de hacer de una historia tan sencilla algo verdaderamente especial y cercano. A través de los lápices exterioriza los sentimientos de los personajes y, no solo te hace empatizar con ellos y ser capaz de comprender sus dudas y sus sentimientos, sino que también sabe trasmitir la pasión y el deseo puramente sexual. Si en
¡Formemos una familia! el terreno sexual era secundario en
¡Enamorémonos! es una parte fundamental de la trama. No olvidemos que todo empieza por una paja.
La edición que nos presenta Arechi es una muy bien cuidada sin transparencias en el papel, buena impresión, bien rotulado y con sobrecubierta con letras en relieve y tomo cosido. Como ya pasa en ¡Formemos una familia! no tiene censura y el lector puede deleitarse de las escenas picantes en todo su esplendor. La traducción, esta vez, ha sido realizada por Natalia Mintegui Arrieta y me ha gustado muchísimo más que la traducción de ¡Formemos una familia! donde el uso de algunos chascarrillos o palabras me rechinaban bastante por no ajustarse, según mi opinión y gusto personal, al carácter de los personajes. Aquí, sin embargo, sí que he sentido que hablaban Chiaki y Kazuma.
Tanto si habéis leído ¡Formemos una familia! como si no podéis leer tranquilamente ¡Enamorémonos! y seguir el orden que queráis. Sí que es cierto que yo os aconsejo leerlo en el orden propio de creación de Tomo Kurahashi ya que en el propio tomo original ya se cuenta, a grandes rasgos, lo que se explica mejor desarrollado en esta precuela. Como es lógico, ambas se complementan, pero no vais a descubrir nada nuevo si lo leéis en el orden de publicación o el inverso, es más. yo creo que es más correcto así ya que leer después ¡Enamorémonos! es hacerlo en retrospectiva y el lector ya va sabiendo cómo son ellos en el presente, que sería ¡Formemos una familia! y luego al ir al pasado es simplemente profundizar más en ambos personajes.
Os animo enormemente a leer esta preciosa historia y todas sus partes, sobre todo ahora que está confirmada la secuela de ¡Enamorémonos! Por parte de Arechi.