Crónicas de manga: La historia de los padres de Shima vol.2 de Mikkamita

"Nosotros vamos a estar unidos para siempre. Lo siento por ti, pero Aoi ya tiene a alguien a su lado." 

SINOPSIS

Akane, un alfa despreocupado que va a su rollo, y Aoi un omega racional y amable, son dos exmacarras que tuvieron un desafortunado encuentro, pero finalmente acaban por unirse y tienen una hija juntos.

Antes del nacimiento de su querida hija, Shima, fueron a universidades diferentes, ¡pero siguen teniendo unas vidas totalmente turbulentas!

Este es el segundo volumen de un omegaverso sobre los días universitarios de unos padres… ¡aunque también descubriremos cómo es vivir una noche en pareja para ellos!

- Leer la reseña del primer volumen

- Gracias a la editorial por el ejemplar de prensa para su lectura y reseña

ANÁLISIS DEL VOLUMEN 

Después de habernos narrado la historia de cómo se conocieron en su época de macarras de instituto, vuelven Aoi y Akane en una segunda, y última, entrega para terminar de contarnos su divertido, caótico y bonito romance en un omegaverse que, si bien sigue presentando los clichés propios del género, Mikkamita los usa para crear una obra graciosa y cozy, rompiendo con el drama que siempre solía representar al subgénero en sus inicios. Obra corta, fresca y adorable, La historia de los padres de Shima es perfecta para adentrarse en este subgénero tan polifacético nacido en el mundo del fanfic occidental.   

"Este tío me resulta de lo más interesante."

Han pasado dos años desde que Aoi y Akane, dos exmacarras omega y alfa, se enamoraron y empezaron a salir como pareja oficialmente. En todo ese tiempo, las cosas entre ambos van viento en popa y su relación se va consolidando poco a poco. Ya universitarios, aunque van a distintas facultades, los días de ambos son tranquilos y pacíficos, dejando atrás su época de maleantes en la que se pegaban mamporros por estúpidas rivalidades o porque iban a tocarle los cojones. No, eso ya pasó... O puede que no.

Hasta en la facultad hay gente chunga, y parece ser que se rumorea que hay unos tíos que pertenecen a la yakuza en la facultad de Aoi. Al ver que su amiga se ha encarado a los supuestos mafiosos, Aoi no se queda al margen y detiene un posible enfrentamiento, cosa que acaba llamando la atención del jefe del grupúsculo en las sombras: el joven Haruki Kijô. Este alfa comienza a seguir a Aoi, interesado a más no poder por ese omega que se ha encarado a sus esbirros como si nada, mostrando una fuerza que es raro que posea alguien como él. ¿Cómo resistirse al famoso Aoi Shirosaki?

"No puedo sacarme de la cabeza mis preocupaciones sobre si soy el indicado para Akane o no."

Por su parte, Akane hace muy buenas migas con una chica llamada Himekawa, una joven apasionada del manga (sobre todo de uno en concreto) y que es miembro del club otaku de la universidad. Entrando en ese círculo, Akane no imagina por lo que está pasando su omega, con el que forjó un vínculo y del que está locamente enamorado. Y es que Aoi, ahora que su mundo se ha abierto y que Kijô ha aparecido en su vida, se está comenzando a dar cuenta de los perjuicios que muchos tienen con las parejas formadas entre personas del mismo sexo, siendo los omegas todavía una rareza en la sociedad, sobre todo en los hombres. Esto, además de la situación familiar particular de Akane, hará que Aoi se cuestione si está a la altura para ser la pareja de Akane o si debería dejarlo para que su novio pueda tener una pareja socialmente normal y aceptada con la que formar una familia.

Continuando el flashback allá donde acabó el primer volumen, Mikkamita prosigue combinando la comedia, lo confortable, el romance, la erótica y una pequeña dosis de drama en la segunda parte de La historia de los padres de Shima, un omegaverse perfecto para los que no simpatizan con el género por su gran carga dramática y sus dinámicas, o como primera puerta para adentrarse en uno de los subgéneros estrella dentro del Boys'Love que va más allá de Japón. 

"No tengo intención de dejar que nadie aparte de mi vínculo me toque."

Llevando ya dos años juntos, Akane y Aoi son ahora dos universitarios que siguen profundizando en una relación que empezó con un primer encuentro de lo más violenta y visceral hasta terminar en un romance confortable y dulce. Estableciendo un vínculo entre alfas y omegas la primera vez que hicieron el amor, Aoi nunca se había arrepentido de estar con Akane o se había planteado si él era el adecuado para ser la pareja de su alfa. Pero ahora lo ha hecho por culpa de Haruki Kijô, un alfa e hijo de un jefe de la yakuza, el cual ha puesto sus miras en Aoi. 

A causa de ese tipo, no solamente otros estudiantes descubren su condición de omega, sino de que ha forjado un vínculo, el también llamado lazo, que solo pueden forjar un alfa y un omega cuando el primero muerde en la nuca al segundo, sellando para siempre sus vidas, excitándose solo entre ellos, haciendo que el omega sienta rechazo si otro alfa exuda feromonas sobre él. El que salga a la palestra todo esto hace que Aoi se percate de lo homofóbica que es la sociedad y todos los prejuicios que tienen sobre los hombres omegas, una condición que todavía es muy minoritaria. 

Ante esto, y sabiendo lo bien que Akane se lleva con una compañera de la facultad, Aoi comienza a comerse la cabeza y a agobiarse, a creer que tal vez haber forjado ese vínculo fue un error y que Akane se merecería a una pareja mejor que él. 

Todo esto llevará a varios malentendidos, pero, sobre todo, a que la relación de pareja de ambos se haga más fuerte y que Akane y Aoi terminen de comprender lo más básico e importante para que su vínculo afectivo sea irrompible e indestructible pase lo que pase. 

"No concibo un futuro sin ti, Aoi." 

De lectura ligera, con momentos eróticos superdulces, escenas graciosas y momentos de alta carga sentimental, La historia de los padres de Shima es una obra maravillosa donde la forma en la que se narra es un completo puntazo. En vez de tener una obra lineal en lo que al tiempo interno se refiere, contamos con una obra que inicia in media res para luego ir ofreciéndonos toda una serie de flashbacks para contarnos lo que realmente quiere el autor: explicar cómo se conocieron, se enamoraron y llegaron a forjar la pareja consolidad, madura y con una hija que tenemos en el tiempo presente. Y para conseguir esto tenemos la figura de Haruki, el hijo de un jefe de la yakuza que sacará nuevamente la vena macarra de Aoi y Akane, pero también hará que los protagonistas entiendan cuál es el mundo real y enfrenten realmente su situación y sus sentimientos. Y todo esto, al igual que en el tomo anterior, lo tenemos mezclado con situaciones muy divertidas y absurdas, haciendo Mikkamita con ello que la carga emocional dramática sea menor para el lector y el manga tenga un espectro mayor, que no se haga una historia sufrida y de contenido sensible, sino ligera, adictiva, adorable, divertida y hogareña. Es decir: trasmite un sentimiento bonito de familia estructurada, de un hogar bien constituido, feliz, en el que el niño tiene todos los cuidados para vivir una infancia feliz. Así como una pareja que, a pesar de las circunstancias, se ama con locura. 

En esta serie se normaliza las familias entre personas del mismo sexo, puesto que en el universo de La historia de los padres de Shima no es muy normal las parejas entre hombres (o entre mujeres), aunque sean alfa y omega, ya que los omegas hombres son toda una rareza.   

Algo muy positivo que salen de esta miniserie de 2 tomos es el spinoff de Haruki y Tsubaki, su sirviente y quien lo ha cuidado desde siempre, el verdadero interés amoroso del joven señorito, en Haruki kun chi no koijihen el cual sale a la venta este mes de agosto de 2025. Espero que también nos llegue a España, ya que este personaje tan enigmático termina por llamarte la atención en este segundo tomo y más cuando aparece su sirviente, más mayor y por el cual tiene pedazo de crush el chaval. No sé vosotres, pero a mí es que este tipo de parejas e historias me flipan y tremendas ganas tengo de que podamos disfrutar de esta obra también, así como ojalá nos lleguen más obras de Mikkamita, autora que no solo tiene un trazo muy bonito, sino que también contamos con una narrativa ágil y que fluye, con personajes carismáticos y muy bien creados, siendo una autora que te puede contar lo que quiera y como quiera. 

Tanto si os gusta mucho el omegaverse, como si es un género que os causa cierto rechazo por la crudeza que suele haber en este tipo de historias, La historia de los padres de Shima es todo lo contrario, ya que estamos ante una miniserie de comedia romántica donde las cosas serias saben narrarse de modo más ligero y sin tanta carga sentimental, siendo los momentos bonitos los que más imperan. 

Si os apetece una lectura confort, cozy, corta, terminada y completa en tiendas durante este verano (o en cualquier época del año), dadle una oportunidad a  La historia de los padres de Shima, puesto que no solamente os quedaréis enamorados de los tarambanas de sus padres, sino también de la pequeña Shima, una niña dulce que quiere a sus dos padres y que está orgullosa de ser su hija.