"Tengo la sensación de que nuestra amistad está llegando a su fin."
FICHA TÉCNICA
- Título original: Anti-romance (en japonés アンチロマンス)
- Autora: Hidaka Shoko (en japonés 日高ショーコ)
- Editorial española: Planeta Cómic
- Editorial Japonesa: Gentosha
- Serie completa de dos volúmenes serializada en la revista Rutile. El primer volumen salió a la venta en Japón en el año 2020.
- Undécimo puesto en la categoría BEST comic en los BL Awards 2021.
- BL, romance, slice of life, LGBTIQ, drama, amigos de la infancia
- Traducción: María Reimondo Saá
- Precio: 8'95€
- La primera tirada trae un set de postales de regalo.
- Ya a la venta
- Gracias a la editorial por el ejemplar de prensa para su lectura y reseña.
SINOPSIS
Amigos de la infancia y compañeros de clase. Han pasado seis años desde que se graduaron y empezaron a vivir juntos. La relación de Kakitani, redactor publicitario, y Suô, peluquero, se consume bajo la máscara de la amistad. Aunque sienten algo el uno por el otro, no se atreven a dar un paso al frente. ¿Podrán vencer el miedo que los ancla al pasado?
OPINIÓN PERSONAL
Aquellos que lleváis años siguiéndome por redes sociales sabéis que Hidaka Shoko es uno de mis pilares fundamentales dentro de mi trinidad del BL en Japón. Siendo la autora de mi manga favorito del mundo mundial, Blue Morning (que os recomiendo encarecidamente leerlo, y más con la oferta que lazó Nowevolution con la serie completa por 50€), llevo años siguiendo todas las obras del género por la mangaka, siendo Anti-romance una que seguí muy de cerca en redes, puesto que cuando Hidaka se puso manos a la obra para terminarla estuvimos todos confinados en plena pandemia allá en el 2020. Habiendo leído el primer tomo en francés años antes de que Planeta Cómic anunciara esta licencia, ahora he podido disfrutar de otro maravilloso Boys'Love de mi diosa Hidaka en mi lengua materna, una miniserie de solo dos volúmenes que nos presenta a dos amigos de la infancia que llevan seis años viviendo juntos. Aunque ambos se aman, guardan eso muy dentro de ellos, tanto que lo que podría haber sido una preciosa historia de amor se torna en un sufrido romance anticlimático en los que solo imperan los silencios de sentimientos no dichos.
Vecinos, amigos de la infancia, compañeros de clase y ahora de piso, Ryô lleva seis años viviendo con Hiroki Suô. Manteniendo un status quo que nadie ha verbalizado, ambos son más que amigos pero menos que amantes. A pesar de los roces ocasionales, las caricias sin querer queriendo, ambos fingen que es algo normal, que no hay nada más allá de esa amistad que siempre han compartido.
Haciendo cada uno su vida laboral, Ryô trabaja en una empresa publicitaria, mientras que Suô trabaja de peluquero, queriendo dedicarse al estilismo para hacerse cargo de la peluquería que regenta su madre llegado el momento. Mientras que Ryô sí que hace lo que le gusta (o más o menos está en el campo de la escritura creativa, algo que va con su vena de escritor), Suô no es que quiera ser estilista porque le guste, sino porque se siente obligado a ello por ser el hijo mayor y por ese deber familiar moral que tan arraigado está en las culturas asiáticas.
Y en esos seis años en los que han avanzado laboralmente, personalmente siguen estancados en un punto en el que Ryô se siente atrapado. Sin salida. Estancado a tener un puñal en el corazón.
Narrando magistralmente una obra muy adulta, realista y compleja, Hidaka Shoko nos presenta Anti-romance, una miniserie que nos relata la aceptación de la sexualidad, la valentía de aceptar tus sentimientos y tu yo interior, a la vez que critica las convenciones y la normalidad social dentro de la sociedad japonesa.
"¿Sabes hasta qué punto eres tú quien guía mis acciones?"
Viviendo juntos durante seis años, los amigos Ryô y Suô comparten piso a la vez que mantienen una relación que va más allá de la amistad, pero que no llega a ser una relación sentimental. Prodigándose caricias que parecen accidentales o inocuas, ambos parecen estar jugando al gato y al ratón, fingiendo que no ven lo que subyace entre ambos. Aprovechándose de que Ryô siempre acepta sus caprichos, Suô adora que Ryô siempre saque tiempo para ir a beber o cenar fuera cuando él se lo propone, aunque esté ocupado. Él es lo primero y eso hace sentir poderoso a Suô.
Por su parte, y a pesar de lo que le duele el comportamiento de Suô, Ryô siempre termina accediendo a los caprichos de su compañero, algo que un amigo normal no haría, pues para todo debe haber un límite. Y ambos lo saben. La realidad es que está cansado en su fuero interno de esos sentimientos tan intensos que lo carcomen por dentro; unos que no pueden salir y liberarse. Pero no será hasta que su superior, Towada, entre en escena que tanto Ryô como Suô deban enfrentarse a esos sentimientos que saben que existen, pero de los que llevan años huyendo.
Y es que los personajes secundarios son esenciales en Anti-romance, siendo los catalizadores que hacen que Ryô y Suô terminen rompiendo el status quo en el que estaban estancados, incapaces de moverse hacia un lado u otro. Haciendo que Ryô tenga que enfrentarse a la realidad de sus sentimientos y a su relación con Suô, Towada es un personaje que se aleja del típico tercero en discordia, siendo más el del consejero metomentodo que lo único que quiere es ayudar, pero sabe que si lo hace de la forma más convencional que existe, no logrará abrirle los ojos a Ryô, más que nada por su carácter.
Y es que Ryô y Suô son dos personas opuestas, completamente diferentes, pero que vemos que se han amoldado el uno al otro, haciéndose las típicas concesiones que deben hacerse las parejas cuando conviven durante muchos años para poder mantener así una harmonía y una coexistencia pacífica.
Introvertido, serio y siempre con la cabeza en todo tipo de libros, Ryô solamente ha tenido a Suô como amigo, dejando de lado que luego desarrollarse sentimientos románticos por él. A diferencia de Ryô, Suô sí que sabe socializar y también ha tenido novias a lo largo de su vida, todo lo contrario a su amigo, más que nada porque a Ryô no le han atraído nunca las mujeres, algo que solamente comienza a aceptar y a reconocerse cuando Towada lo saca de la zona segura que da la heteronormatividad.
"Seguro que no eres el único que finge no darse cuenta."
Adulta y realista, Anti-romance nos muestra un retrato de la sociedad japonesa tan conservadora y homófoba que hace que haya personas del colectivo que deban esconderse o que tengan miedo de expresar lo que sienten; incluso ser ellas mismas. Me encanta que tengamos distintos personajes queer y LGBTIQ con sus propias historias personales, porque es un retrato fidedigno de lo que hay en las calles y de que hay diferentes normalidades, no una cerrada que han dictaminado otros. La verdadera normalidad es la que cada uno identifica y siente, la que ha vivido.
Narrando desde varios puntos de vista, la narrativa de Hidaka Shoko es deliciosa. Centrándose siempre en la psicología de los personajes, haciendo que el lector pueda comprender y empatizar con ellos, el lector se sumerge en la cotidianidad de Anti-romance gracias a los fondos y paisajes de la obra, así como sus transiciones, mostrándonos distintos entornos que concurren los personajes. Los pequeños gestos, las miradas... Hidaka Shoko evoca muchísimos sentimientos con su trazo, el cual es muy personal a la vez que realista, un estilo muy cuidado y detallista.
La edición que nos presenta Planeta Cómic es tal cual la japonesa, salvo porque somos el único país en el que no han sacado la edición con el miniartbook que venía con el tomo original, algo que sí han hecho otras editoriales en otros países. Si queréis mi opinión: una pena. En contraposición, incluye dos postales de dos ilustraciones que se incluyen en ese miniartbook. Dicho esto, el libro es de tamaño b6, con sobrecubierta y una página a color. Todo lo demás en blanco y negro, con una buena impresión de las imágenes en la que no hallamos moiré en las tramas, ni un mal guillotinado de las páginas ni ningún defecto destacable. El tomo no viene cosido, cosa que lo hace más vulnerable a posibles roturas futuras, y la página inicial a color se me ha despegado un poco, pero viene bien pegada a la cubierta. Una pena que solo sea cola, porque con el calor que vamos a tener de ahora en adelante no sé yo si con el tiempo y relecturas el pobre seguirá entero. Sobre la rotulación, menos una errata en una ficha de personaje en la que han intercambiado los nombres, en general está bien y no hay problemas para leer los bocadillos ni los textos fuera de los mismos.
En conclusión, ha sido una experiencia maravillosa leer la edición española, y obviamente quiero tener también el segundo tomo y me importa un bledo tener el manga repetido, no sería la primera vez con Hidaka Shoko que tengo mil ediciones de sus mangas (tengo cuatro ediciones diferentes de Blue Morning).
Tanto para aquellas personas que ya conocéis a la mangaka y os gusta tanto como a mí, como los que no conocéis a Hidaka Shoko, pero queréis leer una obra que se aleje de las historias generalistas entre estudiantes de instituto, de mangas donde prima más el sexo, o buscáis una historia seria, compleja y realista, Anti-romance es lo que necesitáis y no lo sabéis.
Siendo solamente dos tomos (donde el segundo tiene casi 300 páginas para lograr darle el final que merece la obra), es una muy buena apuesta para leer algo del tirón, además de que os aconsejo leer la obra al completo del tirón, puesto que la experiencia lectora es mucho más grata que leyendo los tomos con mucho tiempo de separación. ¿Os animáis?
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