viernes, 14 de julio de 2023

Crónicas de manga nº 21: Barreras del corazón vol. 3

"Me gusta. Estoy enamorado, simplemente. Así que, ¿por qué me duele tanto?" 


La distancia entre ellos se agranda tras un inesperado abrazo, pero no hay tiempo de arreglar nada antes de salir hacia Kioto… ¿Servirá este viaje para que se sinceren el uno con el otro?

SINOPSIS

Yamato no puede más. Los celos, la posesividad, su deseo por ser algo más que el mejor amigo de Kakeru... le están comiendo por dentro. Pero tiene miedo de perder a su compañero si le confiesa la verdad: lleva enamorado de él desde siempre. Tras ver lo que parecía, a simple vista, una cita entre Kakeru y Akane, Yamato se deja llevar y abraza a Kakeru, creando un momento incómodo entre ellos y provocando que se distancien aún más. Sin embargo, no hay tiempo para recuperar el equilibrio antes de viajar a Kioto... y todo queda envuelto en una sensación de incertidumbre. ¿Ayudará el viaje a que confiesen sus sentimientos? ¿O los deseos de ambos seguirán sin salir a la luz?

- Lee la reseña del primer tomo aquí 

- Lee la reseña del segundo tomo aquí


ANÁLISIS DEL TOMO

En este nuevo tomo, lleno de sentimientos por ambas partes, Kakeru está muy rallado a causa del abrazo inesperado que le dio Yamato. El chico no entiende los motivos de su amigo para estrecharlo entre sus brazos y, cada vez que rememora el incidente, el corazón se le acelera y se pone colorado hasta la raíz del pelo. Las cosas no es que mejoren al ver que Yamato parece estar como siempre, sin darle importancia a algo que a él lo tiene ralladísimo. Pero tampoco es el momento de estar en la parra: y es que llega el viaje escolar, uno de los momentos que más esperan los estudiantes (y los lectores de romances de institutos). 

Yendo a Kioto con el instituto, los chicos estarán en el mismo grupo junto con otros compañeros, visitando los lugares turísticos más emblemáticos y viviendo las típicas cosas que suelen pasar en los viajes escolares. Y también en el BL. No solo tendremos una escena only one bed, sin quererlo ni beberlo entre nuestros niños, sino que el mismo Kakeru tendrá que intentar poner en orden sus pensamientos y sentimientos por Yamato.

Mientras tanto, Yamato... El pobre sigue en las mismas: aguantándose en silencio su amor por Kakeru, sus deseos e intentando que este no se entere de nada, pero sin alejarse de él y queriendo compartir muchos recuerdos en su viaje a Kioto. Pero el pobre no lo va a tener fácil y algo hará que sus planes con Kakeru se vayan al garete y que no pueda evitar sufrir por ser incapaz de dejar de quererlo y de padecer por ese amor sin corresponder.

En este tomo un personaje clave es Hosaka, un compañero de clase y que parece estar muy interesado en Yamato, en ser su amigo, y que está muy encima del chico como si hubiera intuido la verdad en el corazón de Yamato. Gracias a Hosaka, que tendrá sendas conversaciones tanto con Kakeru como con Yamato, se dará un paso adelante, llegando al final del tomo donde ocurre algo sumamente importante, dejándonos con la miel en los labios y las ganas de continuar.   

Tanto el ritmo como el desarrollo de este tercer tomo de Barreras del corazón es igual al de los dos anteriores. Tenemos un ritmo lento, pero constante, típico de los slow burn, con un desarrollo profundo de las dudas y de los sentimientos de los personajes mientras interactúan entre ellos y con las personas que los circundan y que hacen que ellos deban moverse sin estancarse. 

El dilema de la amistad sigue vigente por parte de Yamato, pero también por la de Kakeru. Con el amalgama de sentimientos que tiene ahora mismo, ¿tiene derecho a seguir siendo su amigo? Ahora que no piensa tanto en él como una amigo y que no puede dejar de darle vueltas a la idea de que Yamato, posiblemente, siente algo por él. 


Ambos protagonistas deberán decidir si callarse lo que están sintiendo o ser valientes y sincerarse con el otro. El que sean amigos de la infancia es más un impedimento que una ayuda. Ya desde el principio el miedo de que su relación se rompa es un hándicap para ambos, sobre todo en el caso de Yamato para poder decirle a las claras a Kakeru que está enamorado de él. Pero, a su vez, esa amistad es la herramienta y el poder que tiene el propio Kakeru para llegar hacia Yamato, un personaje que, a cada tomo, vemos que tiene una personalidad muy compleja y que tanto su amistad como su relación con Kakeru es una parte vital para él. 

Personalmente, Barreras del corazón es una lectura confort total para cualquier lector. Eso no quita que no se sufra con los personajes, pero en esta obra, además del drama, lo que prima es lo cuqui, lo bonito y la bella relación que traen de serie Yamato y Kakeru. Además que, aunque la trama sea sencilla, su desarrollo no lo es para nada, y los personajes están muy bien caracterizados y van evolucionando poco a poco a lo largo de los capítulos. Y este tipo de narraciones son las que más disfruto. A veces no es necesario crear el plot del siglo para que una obra esté bien, lo más importante, al menos en mi caso, es el desarrollo y siempre voy a preferir un plot simple y trillado, pero con una ejecución perfecta y profunda, a una trama rompedora con desarrollo mediocre. 

¿Qué les deparará a este par de muchachos en el próximo tomo después del final en el que nos deja Mika sensei? GANAZAS de continuar. ¿Y vosotres?


No hay comentarios:

Publicar un comentario